El Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado hoy por unanimidad una resolución en la que exige a todos los combatientes que respeten las normas internacionales que protegen a los servicios sanitarios en las guerras y recuerda a los Gobiernos su responsabilidad para hacer que estas normas se cumplan.
El texto fue impulsado por España, Uruguay, Nueva Zelanda, Egipto y Japón y su adopción llega sólo unos días después de que el bombardeo a un hospital apoyado por MSF en Alepo, Siria, dejara tras de sí 55 víctimas mortales en el hospital y sus alrededores, de las cuales 6 eran trabajadores sanitarios.
Adjunto se puede leer el discurso que ha presentado nuestra Presidenta Internacional en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.
– En el primer mes y medio de 2016, 10 ataques aéreos y bombardeos alcanzaron 7 hospitales de MSF y estructuras médicas apoyadas por MSF, de las cuales 6 estaban en Siria y 1 en Yemen.
– En 2015, 106 bombardeos y ataques aéreos alcanzaron un total de 75 hospitales de MSF y estructuras médicas apoyadas por MSF, de las cuales 63 estaban en Siria, 5 en Yemen, 5 en Ucrania, 1 en Afganistán y 1 en Sudán.
– De media, una estructura de salud apoyada por MSF fue atacada o bombardeada cada semana durante 2015 y las primeras seis semanas de 2016 en Siria.
– El Comité Internacional de la Cruz Roja documentó un total de 2.400 ataques contra trabajadores sanitarios, pacientes, instalaciones médicas y ambulancias en sólo 11 países entre 2012 y 2014.
– En Sudán del Sur, 58 personas han sido asesinados entre diciembre de 2013 y enero de 2015 en insalaciones médicas, incluyendo los 25 pacientes asesinados en nuestras instalaciones de Bentiu, Bor, Leer y Malakal.