Valle de Tansa, India.
Con el apoyo de los donantes, PRASAD está dotando a los pequeños agricultores de nuevas herramientas para solventar sus problemas. La agricultura es la columna vertebral de la economía india, pues alrededor del 65% de la población depende de ella para poder vivir. No obstante, el crecimiento y desarrollo ha sido lento, especialmente entre los cultivadores de pequeñas parcelas, como los que hay en el Valle del Tansa. El gobierno indio espera que el rendimiento agronómico crezca un 4% hasta 2012. Para que los agricultore s lo consigan, deben mejorar la productividad, reducir los costes e i ncrementar su rendimiento, y ellos saben que las asociaciones de agricultores pueden ayudarles a conseguirlo.
El Valle del Tansa tiene ahora cinco asociaciones de agricultores de PRASAD, con un total de 212 afiliados entre hombres y mujeres. Están creando concierto de inversión con instituciones tales como el Banco Nacional para la Agricultura y el Desarrollo Rural así como con el sector privado. Como resultado, las Asociaciones de Agricultores tienen acceso a préstamos que no siempre están al alcance de las personas de manera individual. “Con esos préstamos, las asociaciones compran semillas , fertilizantes y equipamiento a precio de mayorista.pueden. Los agricultores se ayudan entre ellos a sembrar y trasnsportar sus cosechas al mercado,” dice un miembro de PRASAD Chikitsa.
Como en todos los programas de PRASAD, el elemento clave son las persona s. Pranali Patil, que ha impusado varios grupos de autoayuda en Ghodgao, India, sintetiza el espíritu que anima las asociaciones de agricultores de PRASAD: «En nuestra aldea, las mujeres han abierto la Asociación de Agricultores para dar una nueva orientación a las actividades agrícolas. Los cambios no pueden producirse con rapidez, pero no nos detendremos en nuestros esfuerzos. Al final, conseguiremos que nuestro futuro sea mejor y más fructífero. Tenemos confianza en que las asociaciones nos ayudarán a cambiar nuestro futuro»
























