
Condenamos firmemente el uso de la violencia y la fuerza en la franja de Gaza, a la par que recordamos que el castigo colectivo es ilegal, según el Derecho Internacional. Desde UNRWA pedimos máxima moderación y hacemos un llamamiento al estricto cumplimiento del Derecho Internacional por parte de todos los actores relevantes con el fin principal de evitar el sufrimiento de la población.
UNRWA continuará vigilando de cerca el impacto sobre los refugiados de Palestina, además de intentar garantizarles protección y ayuda humanitaria de emergencia.
En la misma línea, desde UNRWA España, queremos hacer llegar nuestra más tajante condena al secuestro y asesinato de un niño palestino en Jerusalén Este y nos unimos a la condena enérgica y a las palabras del Secretario General de la ONU y otros altos funcionarios Naciones Unidas sobre el secuestro y asesinato el 12 de junio de tres israelíes, entre ellos dos menores.
En Gaza, donde la escalada militar se ha incrementado considerablemente en los últimos días, dejando tras de si decenas de heridos, la mayoría de ellos civiles; la población se encuentra en riesgo y en estado de emergencia. Tres civiles israelíes resultaron heridos en Sderot como resultado del lanzamiento de cohetes desde Gaza. Urgimos al fin de la violencia que como la historia ha mostrado, puede tener consecuencias devastadoras para los civiles, especialmente para los niños.
En Cisjordania, los incidentes de las últimas semanas han tenido un profundo impacto humano. Del 13 de junio al 1 de julio, 7 palestinos han muerto, entre ellos 5 refugiados y casi 200 han resultado heridos. UNRWA tiene constancia también de que 88 personas han sido detenidas en campamentos de refugiados de Palestina, como resultado de las operaciones del ejército israelí. La reciente escalada de violencia confirma la tendencia al alza en el número de muertes de Palestinos en Cisjordania que se ha venido produciendo estos últimos meses. El uso continuo de munición real en campamentos de refugiados densamente poblados aumenta las probabilidades de que se produzcan lesiones graves e incluso muertes de civiles.
Raquel Martí,
Directora Ejecutiva
UNRWA España