
ONGAWA recuerda que nuestros equipos electrónicos pueden estar vinculados a violaciones de Derechos Humanos alrededor de todo el mundo: financiación de guerras en la República Democrática del Congo, explotación laboral en China o contaminación ambiental en Pakistán.
Madrid, 16 de mayo de 2014. Con motivo del Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información que se celebra mañana 17 de mayo, ONGAWA, a través de su campaña Tira del Cable, llama la atención sobre los impactos en los Derechos Humanos y el medio ambiente que tiene la producción, uso y posterior desecho de algunos productos electrónicos.
Los productos electrónicos están cada día más presentes en la vida de las personas. Así, por ejemplo, en el año 2013, había en España 50 millones de teléfonos móviles para una población total de 46 millones de personas.
Este alto nivel de consumo, que no es exclusivo de España, lleva asociado, en numerosas ocasiones impactos negativos en los Derechos Humanos y el medio ambiente que se producen tanto en la fabricación, como en el uso y posterior desecho de productos electrónicos.
Algunos ejemplos de estos impactos son los siguientes:
· Existen varios conflictos armados relacionados con el control de recursos naturales en países en desarrollo. El más paradigmático es el caso de la República Democrática del Congo donde existe un conflicto armado relacionado con el control del coltán, material utilizado para construir condensadores para teléfonos móviles, cámaras digitales y ordenadores portátiles.
· Se han detectado violaciones de los derechos laborales en fábricas de electrónicos en todo el mundo, tales como jornadas laborales excesivas, obligación de realizar horas extra no remuneradas, pago de salarios por debajo de los límites legales, especialmente a mujeres, o prohibición de sindicarse o hacer huelga.
· La basura electrónica es actualmente el tipo de basura que más rápidamente crece en el mundo. En Europa se tiran cada año más de 100 millones de móviles generalmente con menos de dos años de uso y en 2010 se generaron 8,7 millones de toneladas de basura electrónica (15 kg. anuales por persona). Aunque existe una directiva europea para recolectar y tratar adecuadamente la basura electrónica apenas se aplica a un 25% de la misma. Asimismo, en ocasiones, los residuos de electrónicos se exportan de forma ilegal, a países como Nigeria, China o Pakistán.
Ante esta situación, ONGAWA puso en marcha en 2013 la campaña Tira del Cable con el objetivo de sensibilizar a la ciudadanía, fabricantes, gobiernos y compañías de telefonía sobre estos impactos negativos y de la necesidad de que se realice un consumo responsable de productos electrónicos.
En este sentido la campaña propone, entre otras medidas:
· A la ciudadanía seleccionar los fabricantes más respetuosos con los Derechos Humanos, los productos más eficientes en términos de consumo de energía o aquéllos que incorporan menos sustancias peligrosas.
· A los gobiernos establecer autoridades nacionales encargadas del monitoreo de la recolección de desechos electrónicos, el reciclaje y los flujos de exportación, de forma que se verifique si los productores cumplen con su responsabilidad.
· A los fabricantes establecer requisitos sobre el origen de los minerales a sus proveedores, auditarlos y, en caso necesario, ayudarles a implementar las medidas necesarias que aseguren los Derechos Humanos.
· A las operadoras de telefonía móvil centrar sus acciones de marketing en la suscripción del servicio de telefonía (vender la tarjeta SIM) y no en la adquisición del terminal (vender la SIM con un nuevo teléfono).