Iraq: los teléfonos móviles ayudan a transferir dinero en efectivo a las familias rurales afectadas por el conflicto

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©FAO/ Cengiz Yar

El programa de “dinero por trabajo” de la FAO anima a las personas desplazadas a regresar a casa

Muchas familias rurales vulnerables de Iraq contarán a partir de ahora con un medio más seguro y fiable de recibir ingresos gracias a la tecnología para transferir dinero vía teléfono móvil adoptada por primera vez por la FAO como parte de un programa de “dinero por trabajo” destinado a rehabilitar las tierras e infraestructura agrícolas.

El programa -financiado por el Gobierno de Bélgica- apoyará a 12 000 víctimas del conflicto en 30 aldeas en las gobernaciones de Kirkuk, Anbar, Salah al-Din y Ninewa.

Beneficiará a los agricultores locales, que podrán reiniciar o ampliar sus actividades agrícolas con infraestructuras rehabilitadas, y ofrecerá oportunidades de sustento a las personas desplazadas que regresen a sus lugares de origen.

Los participantes –miembros de hogares que no tienen otra fuente de ingresos- incluyen mujeres que a menudo son el único sostén para sus familias y personas con discapacidad. Se trata de beneficiarios cuyas familias permanecieron en sus aldeas durante el conflicto o regresaron después de haber sido desplazados por los combates.

“El uso de la tecnología de los teléfonos móviles agilizará la entrega segura de transferencias de efectivo a los participantes, que son algunas de las personas más vulnerables del país”, señaló Fadel El-Zubi, Representante de la FAO en Iraq. “Ofrecer oportunidades de ingresos –añadió- es fundamental en las zonas rurales afectadas por el conflicto, donde la competencia por el empleo es alta, el trabajo escasea y la gente se esfuerza por mantener a sus familias”.

Asociación internacional

Para facilitar los pagos, la FAO se ha asociado con Zain, un operador de telefonía móvil y de datos con presencia comercial en ocho países de Oriente Medio y África. Los nombres de los participantes –y sus números de identificación- son registrados previamente por la empresa y reciben una tarjeta SIM gratuita. Una vez que cada persona completa un cierto número de días de trabajo, reciben un mensaje de texto con un código de seguridad personalizado. En ese momento pueden percibir sus salarios de cualquier agencia certificada de transferencias de dinero vía teléfono móvil, siempre que su código y número de identificación coincidan con los registrados.

“Además de proporcionar ingresos muy necesarios a los participantes, el programa mejorará la producción agrícola en las comunidades circundantes, a través de actividades como la rehabilitación de canales para el riego y la preparación de las tierras de cultivo para la siembra”, explicó El-Zubi. “Esto, a su vez, alentará a los miembros de la comunidad aún desplazados por el conflicto a regresar a casa y comenzar a cultivar de nuevo. El objetivo de la FAO es apoyar a las personas a levantar cabeza lo antes posible y reducir su dependencia de la ayuda alimentaria”.

Cerca de 12 millones de iraquíes residen en zonas rurales y dependen de la agricultura para su subsistencia. Años de conflicto han destruido o dañado cosechas, equipos, infraestructuras, ganado, semillas, cultivos y alimentos almacenados; y dejado a 3,2 millones de iraquíes en situación de inseguridad alimentaria. A fecha 15 de julio de 2017, más de 3,3 millones de personas permanecían desplazadas dentro de Iraq, mientras que unos 2 millones habían regresado a sus hogares.

Se necesita más apoyo

A medida que el Gobierno de Iraq retoma el control de más áreas, se hace necesario un gran esfuerzo para rehabilitar las infraestructuras clave para poder reanudar la producción agrícola y restablecer los medios de subsistencia. La FAO solicita una financiación urgente de 74,5 millones de dólares EEUU para ayudar a 1,39 millones de personas en 2017, mediante la rehabilitación de las infraestructuras agrícolas dañadas, el apoyo a los agricultores para vacunar y alimentar a su ganado y ampliar el programa de “dinero por trabajo” y otras oportunidades de ingresos. La labor de la FAO, en coordinación con el gobierno iraquí, apoya a las familias que regresan a las zonas reconquistadas, a las familias desplazadas internamente, a las comunidades de acogida y a los refugiados de Siria.