El Fondo Mundial ha modificado su sistema de desembolsos para permitir que las decisiones sobre desembolsos de subvención se adopten una vez al año, no varias veces como hasta ahora. Después de tomar la decisión sobre desembolso, se efectúa una transferencia de fondos. Así, se reduce la burocracia y las transferencias de efectivo se gestionan más eficazmente.
Con el nuevo modelo, el personal del Fondo Mundial y los receptores principales podrán colaborar para adoptar decisiones de desembolso anual que aumenten la previsibilidad del financiamiento a lo largo del año (y disminuyan la carga administrativa) al requerir menos peticiones de desembolso. Además, las transferencias de efectivo graduales pueden ayudar a gestionar mejor la suma de efectivo en las cuentas de subvención. El proceso de decisión de desembolso anual sustituye al actual escalonamiento de los compromisos. La combinación de estos dos procesos también simplifica el trabajo del personal del Fondo Mundial y facilita la previsión de futuras necesidades de financiamiento.
Los cambios fueron adoptados por el Comité Ejecutivo de Gestión de Subvenciones del Fondo Mundial en febrero. El documento donde se describen estos cambios se denomina “Directrices sobre la transición a las decisiones de compromiso y desembolso anual”. Estos cambios permiten al Fondo Mundial efectuar más seguimiento durante todo el ciclo de cada subvención, en lugar de supervisar sólo hitos establecidos. Con ello se reducirán los retrasos en la recepción de fondos en el país. Los receptores deberán informar de los progresos obtenidos en la ejecución de subvenciones a través de informes semestrales. El Fondo Mundial adelantará fondos de reserva que permitan cubrir el tiempo necesario para la elaboración de informes anuales y la evaluación de las necesidades del siguiente periodo de desembolso anual.
























