La exposición ‘Puertas’ invita al consumo responsable

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La exposición artística ‘Puertas’, tras su paso por más de 20 ciudades y coincidiendo con el Año Europeo del Desarrollo, permanecerá abierta al público hasta el próximo 28 de Junio en el espacio CentroCentro de la capital. Organizada por la Plataforma ‘2015 y más’, la cual agrupa a 11 ONG de desarrollo, y producida por CIPÓ, Compañía dedicada a la divulgación científica de temas medioambientales y sociales, ofrece recorridos guiados por los 500 metros cuadrados que ocupa a centros educativos, asociaciones y colectivos.

 

La muestra utiliza metafóricamente puertas y ventanas como símbolos de las incoherencias del sistema mundial de producción y consumo y las posibles soluciones de las que los ciudadanos disponen. ‘Puertas cerradas, ventanas abiertas’ podría ser un subtítulo para esta exposición en la que las puertas cerradas representan la asfixia a la que los países desarrollados y las grandes corporaciones están sometiendo al planeta y las ventanas abiertas dan un respiro al visitante proponiendo soluciones al alcance de la mano. El espectador puede así comprender, según los creadores de la muestra «que el mundo feliz en el que vivimos lo es sólo en apariencia» puesto que para mantener este estilo de vida, necesariamente han de producirse violaciones de los derechos humanos».

 

Todo el espacio expositivo está plagado de ‘rastros’ que unen objetos o productos cotidianos con los efectos negativos que conlleva su producción masiva. Así, un teléfono móvil – recordemos que el número de terminales en España duplica al número de habitantes- nos lleva a las minas de coltán en la República Democrática del Congo donde trabajadores extraen dicho mineral por 1 Euro diario. La carne, los cereales, los juguetes de plástico o la ropa son sólo algunos de los elementos habituales en nuestras vidas que la exposición disecciona para suscitar el consumo responsable de la ciudadanía.

 

Una pantalla de televisión reproduce imágenes extraídas de diversos medios de comunicación a modo de denuncia contra el discurso imperante de la sociedad de bienestar. Los creadores de la muestra contraponen, por ejemplo, la reproducción de un anuncio publicitario de Iberdrola con la creciente situación de pobreza energética en nuestro país. Particularmente paradójica resulta esta reproducción en el espacio CentroCentro, gestionado por el Ayuntamiento de Madrid, ya que precisamente en la planta superior del edificio se alberga una muestra de los fondos artísticos de la fundación de dicha compañía energética.