La Fundación Tomillo, que este año celebra su 30 aniversario, ayuda a personas a mejorar su vida con especial atención a los niños, los jóvenes y sus familias. Durante estos 30 años ha atendido a más de 600.000 personas
Madrid, 10 de junio de 2014.- En 2013 el 27,3% de la población española, 13 millones de personas aproximadamente, se encuentra en riego de pobreza y exclusión total (AROPE en sus siglas en inglés). Uno de los datos más alarmantes del análisis de perfiles mayoritarios de pobreza y exclusión, realizado por el Centro de Estudios de la Fundación Tomillo, ONG con 30 años de actividad ayudando a población en situación de dificultad, es que el 23%[1] está compuesto por personas con trabajo, lo que refleja el deterioro de las condiciones laborales en los últimos años. Por otra parte, un 11,7% está formado por jóvenes que en su mayoría estudian y cuentan con un nivel de formación superior a la media española, lo que puede afectar de manera muy seria, apunta el estudio, al relevo generacional de nuestro país.
Según el estudio, y refiriéndose al primero de estos colectivos, a pesar de disponer de trabajo, este colectivo tiene serias dificultades para salir de su situación de pobreza y exclusión debido a sus condiciones laborales, caracterizadas por un salario bajo, temporalidad y precariedad.
Según Carmen García de Andrés, directora de la Fundación Tomillo, ‘se trata de un dato muy preocupante ya que puede dar una idea del empeoramiento de las condiciones laborales experimentado en nuestro país y la disminución de los ingresos brutos de muchas personas cuya situación social se conformó durante el período de auge económico. Además -añade García de Andrés-, abre el marco de actuación de las políticas sociales a un colectivo que anteriormente no era contemplado en los planes de ayuda de manera prioritaria‘.
Según la Fundación Tomillo, este colectivo requeriría actuaciones dentro del mercado laboral, un tratamiento fiscal favorable y el desarrollo de políticas de protección social a la familia.
Este colectivo ya es el segundo más numeroso en riesgo de pobreza por detrás del de las personas desempleadas, que representa el 33,7% del colectivo AROPE en España. Por otra parte, el 15,9% de este colectivo está conformado por jóvenes que en su mayoría estudian y tienen un nivel de formación superior a la media española, lo que refleja la mejora de la formación asociada al relevo generacional. Según el estudio, el 27,8% de este perfil está en paro. Además, la baja intensidad en el empleo impacta a cuatro de cada diez, lo que implica que también viven en hogares afectados por el desempleo. El estudio señala que este grupo precisa de políticas educativas que garanticen la igualdad de oportunidades y políticas activas de empleo.
La Fundación Tomillo, ONG centrada en ayudar a personas en situaciones de riesgo, y con especial foco en niños y jóvenes, ha realizado una radiografía de la población española AROPE, con el objetivo de ayudar a priorizar y orientar la acción política responsable en la definición de ayudas y planes de actuación dirigidos a esta población.
Según el estudio, realizado por el Centro de Estudios de la Fundación, la población española en riesgo de pobreza y exclusión social está actualmente compuesta por 13 millones de personas, lo que representa casi el 28% de la población total de nuestro país. El estudio ha definido seis perfiles de esta población en función de su entorno y situación social real. Los dos grupos más numerosos, como se ha señalado anteriormente, se corresponden con los de las personas sin trabajo (26,2%), seguido por el de personas trabajadoras (23%).
Respecto al primero de ellos (personas sin trabajo), concentra el 40% de la población en pobreza extrema (menos de 199 euros mensuales para vivir). En el perfil tiene una gran incidencia el hecho de que estos hogares están en su mayoría compuestos por al menos un adulto con hijo o hijos, que les hace más vulnerables. El estudio recomienda el desarrollo de políticas de inclusión activas en empleo, asistencia y acceso a servicios públicos y políticas de protección a la familia y a la infancia.
El tercer grupo, formado por personas que residen en hogares con una baja intensidad de empleo, representa el 15,7% de la población AROPE española. Si bien ninguna de estas personas sufre una privación material severa, el estudio advierte de la necesidad de desarrollar políticas que eviten que esta circunstancia se convierta en crónica ya que, en caso contrario, podría conducir a una situación de pobreza.
Según el estudio de la población analizada, el colectivo de personas jubiladas o dedicadas a labores del hogar, representan un 15% de la población AROPE española. En este perfil, el 75% son inactivos, bien por jubilación (50%) o por dedicarse a las labores del hogar y al cuidado de niños o terceras personas (50%). Este colectivo está afectado por la pobreza extrema en un porcentaje inferior a la media (13,2% en comparación con 16,0% de media). En consecuencia, precisaría, de acuerdo con la Fundación Tomillo, de políticas de incrementos de pensiones mínimas y revalorización, acceso a ciertos servicios sin coste (sanidad y dependencia), y políticas dirigidas a incentivar la incorporación de las mujeres al mercado laboral.
El último perfil definido por el estudio de la Fundación Tomillo es el las personas que sufrenprivación material severa. Suponen el 8% de la población AROPE de nuestro país. Según el estudio ninguno de ellos se encuentra en riesgo de pobreza, pero se caracterizan por no poder afrontar gastos imprevistos (98%), no poder mantener su vivienda a una temperatura adecuada (75%), retrasos en pagos de hipoteca o alquiler, en un 47% de los casos, y un 32% no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días. El estudio recomienda el desarrollo de políticas dirigidas a asegurar la alimentación y a abordar la pobreza energética, especialmente de aquellas familias con hijos.
[1] Datos basados de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2012 del INE.
30 Aniversario de la Fundación Tomillo
La Fundación Tomillo, que este año celebra su 30 aniversario, centra su actividad en la integración social de los individuos y colectivos más desfavorecidos, con especial atención a los niños y los jóvenes, a través de la educación, la mejora de la empleabilidad, la creación de empleo directo, el análisis y la innovación. La fundación, que durante estos 30 años ha atendido a más de 600.000 personas, desarrolla distintas actividades, cursos y actividades encaminadas a evitar el abandono escolar, motivar para iniciar ciclos de formación profesional, la creación y adquisición de nuevas competencias o el apoyo a la creación de negocios propios.
En 2013, la Fundación atendió a 26.300 personas. A modo de ejemplo y como parte de su actividad, 5.239 niños recibieron apoyo escolar, asesoró a 985 emprendedores, ayudó a la creación de 154 nuevos negocios, 433 jóvenes realizaron prácticas en empresas y 263 personas consiguieron un puesto de trabajo.
El estudio completo puede descargarse en www.30aniversariotomillo.org
