Reporteros sin Fronteras pide la libertad de Zarganar, que lleva encarcelado desde el 5 de junio de 2008. Acusado de “alterar el orden público”, el blogger y artista disidente fue condenado a cuarenta y cinco años de cárcel, por un tribunal que le juzgó en el interior de la cárcel.
Pocos días después le impusieron una condena suplementaria de catorce años. El 16 de febrero de 2009 quedó reducida a 34 años. “La sanción impuesta a Zarganar pone de manifiesto que se ha hecho una parodia de justicia.
¿Se condena a una persona a una pena tan grave de cárcel por “alterar el orden público”? La Junta militar le sometió a un juicio arbitrario. Zarganar es culpable de haberse convertido en una fuente informativa fiable, en un país estrangulado por la censura y la represión.
"Padece unas condiciones de detención muy malas y su salud empeora de día en día. También por este motivo tiene que salir en libertad”, ha declarado la organización. A pesar de estar enfermo de ictericia e hipertensión, Zarganar no tiene acceso a un tratamiento médico adecuado en la cárcel de Myintkyina, a la que fue trasladado en diciembre de 2008.
